Por Marvin Santos.
Recuerdo las palabras de un telepredicador estadounidense "... Cada uno de nosotros tiene en su corazón un espacio que tiene el molde de Cristo". Desde siempre este hecho ha estado presente en la humanidad. Ese vacío que provoca la conciencia de que existe un ser superior, es el que impulsó al hombre a buscar a ese ser creador desde los inicios de la historia. Así muchos osaron decir que lo conocían, muchos falsos maestros enseñaron sus propias leyes y se fundaron los cultos paganos. El hombre adoró al Sol, los Astros, los animales. Incluso se adoró y se continúa haciendo a la vida y a la muerte. Todos nacemos con esa conciencia, es parte de nuestra vida. Viene con nosotros, es un detalle "de fábrica".
Platicando de esos hechos con un amigo que se la lleva de "filósofo" y "docto" en toda ciencia, llegamos al punto de discusión respecto a la existencia de Dios. El me planteó sus teorías conspirativas de cómo los fundadores de la Iglesia de Roma manipularon las escrituras y prácticamente se "inventaron la Biblia" en el Concilio de Trento. Me mencionó cómo los norteamericanos han utilizado a la iglesia protestante como un verdadero proyecto de la CIA, a fin de obtener información respecto de las bases sociales de los países y controlarlos de algún modo.... en fin... el tipo es según él, un verdadero y convencido ATEO, materialista, dialéctico.
Evitando entrar en demasiada polémica, sólo le dí mi punto de vista respecto a que, toda la creación es demasiado perfecta como para decir que es obra de la mera casualidad o de la mera explosión de la materia primaria del Universo. Al escuchar mis planteamientos y ya un poco molesto me dijo: "En fin la ciencia es en lo que yo creo, lo que se puede ver y demostrar, es la lógica la que debería regir tu pensamiento al igual que el mío, respeto tus creencias y tu fe, ... gracias a Dios que soy Ateo porque si no... tendría que", lo interesante es que ni siquiera notó ni analizó lo que acababa de decir, y ese es el punto, su conciencia lo delata.
Estimados hermanos, no hay duda que aún el más ateo de los ateos, allá en sus adentros y soledades, tiene ese vacío que solamente Cristo puede llenar. Es un hecho innegable. El orgullo y el asesinato de la conciencia provocado por "la mucha letra" es el que impide y le impedirá a muchas personas aceptar como un hecho la existencia de Dios. Lastimosamente, será hasta después de la muerte que se convencerán de su existencia, ya demasiado tarde para ellos.
Platicando de esos hechos con un amigo que se la lleva de "filósofo" y "docto" en toda ciencia, llegamos al punto de discusión respecto a la existencia de Dios. El me planteó sus teorías conspirativas de cómo los fundadores de la Iglesia de Roma manipularon las escrituras y prácticamente se "inventaron la Biblia" en el Concilio de Trento. Me mencionó cómo los norteamericanos han utilizado a la iglesia protestante como un verdadero proyecto de la CIA, a fin de obtener información respecto de las bases sociales de los países y controlarlos de algún modo.... en fin... el tipo es según él, un verdadero y convencido ATEO, materialista, dialéctico.
Evitando entrar en demasiada polémica, sólo le dí mi punto de vista respecto a que, toda la creación es demasiado perfecta como para decir que es obra de la mera casualidad o de la mera explosión de la materia primaria del Universo. Al escuchar mis planteamientos y ya un poco molesto me dijo: "En fin la ciencia es en lo que yo creo, lo que se puede ver y demostrar, es la lógica la que debería regir tu pensamiento al igual que el mío, respeto tus creencias y tu fe, ... gracias a Dios que soy Ateo porque si no... tendría que", lo interesante es que ni siquiera notó ni analizó lo que acababa de decir, y ese es el punto, su conciencia lo delata.
Estimados hermanos, no hay duda que aún el más ateo de los ateos, allá en sus adentros y soledades, tiene ese vacío que solamente Cristo puede llenar. Es un hecho innegable. El orgullo y el asesinato de la conciencia provocado por "la mucha letra" es el que impide y le impedirá a muchas personas aceptar como un hecho la existencia de Dios. Lastimosamente, será hasta después de la muerte que se convencerán de su existencia, ya demasiado tarde para ellos.
Que Dios te bendiga,
Marvin Santos. Imprimir este post.