Esta reflexión, está basada en el pasaje de Las Escrituras: Joel 1:13-15 RV60:
13 Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.
14 Proclamad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.
15 !!Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso.
Ceñíos y lamentad, sacerdotes; gemid, ministros del altar.
Anteriormente publiqué en mi Facebook en el "Texto de hoy": Jesús te necesita S.O.S.
Quizá tu y muchos más lo vieron y meditaron en el texto. Pero es la verdad, Jesús nos necesita, y su llamado S.O.S. es por Su Mensaje. La gran comisión que fue entregada en las manos de los discípulos, hoy está en nuestras manos. (Mateo 28:16-20; Marcos 16:14-18; Lucas 24:36-49; Juan 20:19-23).
Lucas 24:47 dice: "Y que se predicase en Su Nombre el "arrepentimiento" y el "perdón" de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén."
V. 49 dice: "He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde los alto". (Poder desde lo alto).
Jesús cumplió Su promesa con Su Padre y El Padre con Jesús.
¿Qué hay de nosotros tu y yo, los Ministros, los Embajadores del Evangelio, los transportadores de las "Buenas Noticias" hemos seguido Las Escrituras llevando el mensaje del "Arrepentimiento"? Cada día escucho menos esa Palabra, solo que la han cambiado en prosperidad. Duele, pero es la realidad de un Evangelio "light", liviano, suave. Sin herir a nadie, te recuerdo que Jesús comenzó a predicar y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielo se ha acercado (Mateo 4:17).
Si leyéramos los 3 capítulos del libro del Profeta Joel, y viéramos la situación que vivió el pueblo de Judá, pueblo de Dios; nos daríamos cuenta del fuerte dolor, la angustia, la pobreza y la escasez por la desolación a causa del pecado: Su propia desobediencia. El profeta Joel dijo: proclamad ayuno convocad a asamblea, congregad a los ancianos.
En Suecia cuando es verano es tiempo de vacaciones; ministros, ancianos y pastores se van de vacaciones y no hay reuniones de oración; mejor dicho, que cada uno ore donde pueda y si tiene tiempo. Me atrevo a decirlo porque las Escrituras me enseñan que debo hablar la verdad y no hacerme cómplice del pecado.
La Iglesia de mi pueblo hoy es casa de huéspedes, y recibe a quienes pagan por su estadía para sus vacaciones. Pero no se puede ocupar para orar, la casa de Dios es alquilada; es duro vivir donde lo espiritual pasa a segundo plano, y lo económico toma el primer lugar que es de Dios.
La devastación de la tierra por las langosta en Judá, debe ser nuestro punto de mira. Hoy Europa y en muchos lugares la tierra gimen por su agonía; la crisis espiritual es grande y somos nosotros los que debemos proclamar el mensaje de "Arrepentimiento".
Lo primero que hizo el Profeta Joel: Reunió al pueblo ante el Señor en una Asamblea grande y solemne, santificó la reunión (1:14; 2:15-16).
Lo segundo: Exhortó al pueblo al arrepentimiento y regresar con humildad al Señor con ayuno, lamentaciones, lágrimas e intercesión por la misericordia de Dios (2:12-17).
Lo tercero: Registró La Palabra profética de Dios a Su pueblo en el día de su sincero arrepentimiento (2:18-3:21).
El humilde arrepentimiento de Judá y la gran misericordia de Dios, fueron la ocasión para las profecías de Joel acerca del futuro, que comprenden promesas de restauración, el derramamiento del Espíritu Santo sobre toda la humanidad (2:28-31), y los juicios y la salvación de Dios en el tiempo del fin (3:1-21).
En los 3 capítulos del profeta Joel nos damos cuenta la devastación de la tierra de Judá. Hoy toda la tierra está devastada por el pecado ¿y así nos damos tiempo para nuestras vacaciones? y lo peor, cerramos las iglesias a la oración para que aquellos siervos intercedan delante del Trono de Dios por misericordia.
Europa está cegada, solo tienen sus intereses en la economía, y hoy más que nunca vuelve a caer la bolsa de valores. El año anterior se cerraron 46 iglesias en Europa, es en promedio como de 1 iglesia por semana.
Hoy la casa de Dios está cerrada. Sólo nos queda entrar al aposento alto o encerrarnos en nuestro cuarto de oración. Tengo toda la certeza que tu oración y la nuestra llegará al Trono de la gracia, y Nuestro Señor Jesucristo intercederá por tu clamor y el mío.
Sé que mi pueblo, esta tierra que estoy habitando no será devastada, sino, será transformada con un gran arrepentimiento. Ayúdame a orar como siempre, la justicia divina es el poder de Dios, amén.
Quizá esperabas otro mensaje, pero es lo que Dios ha puesto en mi corazón, y deseo compartirlo contigo en este día, amén.
Tu hermano Marco Marin Parra.
Bendiciones.
Suecia - Lysekil.
Anteriormente publiqué en mi Facebook en el "Texto de hoy": Jesús te necesita S.O.S.
Quizá tu y muchos más lo vieron y meditaron en el texto. Pero es la verdad, Jesús nos necesita, y su llamado S.O.S. es por Su Mensaje. La gran comisión que fue entregada en las manos de los discípulos, hoy está en nuestras manos. (Mateo 28:16-20; Marcos 16:14-18; Lucas 24:36-49; Juan 20:19-23).
Lucas 24:47 dice: "Y que se predicase en Su Nombre el "arrepentimiento" y el "perdón" de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén."
V. 49 dice: "He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde los alto". (Poder desde lo alto).
Jesús cumplió Su promesa con Su Padre y El Padre con Jesús.
¿Qué hay de nosotros tu y yo, los Ministros, los Embajadores del Evangelio, los transportadores de las "Buenas Noticias" hemos seguido Las Escrituras llevando el mensaje del "Arrepentimiento"? Cada día escucho menos esa Palabra, solo que la han cambiado en prosperidad. Duele, pero es la realidad de un Evangelio "light", liviano, suave. Sin herir a nadie, te recuerdo que Jesús comenzó a predicar y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielo se ha acercado (Mateo 4:17).
Si leyéramos los 3 capítulos del libro del Profeta Joel, y viéramos la situación que vivió el pueblo de Judá, pueblo de Dios; nos daríamos cuenta del fuerte dolor, la angustia, la pobreza y la escasez por la desolación a causa del pecado: Su propia desobediencia. El profeta Joel dijo: proclamad ayuno convocad a asamblea, congregad a los ancianos.
En Suecia cuando es verano es tiempo de vacaciones; ministros, ancianos y pastores se van de vacaciones y no hay reuniones de oración; mejor dicho, que cada uno ore donde pueda y si tiene tiempo. Me atrevo a decirlo porque las Escrituras me enseñan que debo hablar la verdad y no hacerme cómplice del pecado.
La Iglesia de mi pueblo hoy es casa de huéspedes, y recibe a quienes pagan por su estadía para sus vacaciones. Pero no se puede ocupar para orar, la casa de Dios es alquilada; es duro vivir donde lo espiritual pasa a segundo plano, y lo económico toma el primer lugar que es de Dios.
La devastación de la tierra por las langosta en Judá, debe ser nuestro punto de mira. Hoy Europa y en muchos lugares la tierra gimen por su agonía; la crisis espiritual es grande y somos nosotros los que debemos proclamar el mensaje de "Arrepentimiento".
Lo primero que hizo el Profeta Joel: Reunió al pueblo ante el Señor en una Asamblea grande y solemne, santificó la reunión (1:14; 2:15-16).
Lo segundo: Exhortó al pueblo al arrepentimiento y regresar con humildad al Señor con ayuno, lamentaciones, lágrimas e intercesión por la misericordia de Dios (2:12-17).
Lo tercero: Registró La Palabra profética de Dios a Su pueblo en el día de su sincero arrepentimiento (2:18-3:21).
El humilde arrepentimiento de Judá y la gran misericordia de Dios, fueron la ocasión para las profecías de Joel acerca del futuro, que comprenden promesas de restauración, el derramamiento del Espíritu Santo sobre toda la humanidad (2:28-31), y los juicios y la salvación de Dios en el tiempo del fin (3:1-21).
En los 3 capítulos del profeta Joel nos damos cuenta la devastación de la tierra de Judá. Hoy toda la tierra está devastada por el pecado ¿y así nos damos tiempo para nuestras vacaciones? y lo peor, cerramos las iglesias a la oración para que aquellos siervos intercedan delante del Trono de Dios por misericordia.
Europa está cegada, solo tienen sus intereses en la economía, y hoy más que nunca vuelve a caer la bolsa de valores. El año anterior se cerraron 46 iglesias en Europa, es en promedio como de 1 iglesia por semana.
Hoy la casa de Dios está cerrada. Sólo nos queda entrar al aposento alto o encerrarnos en nuestro cuarto de oración. Tengo toda la certeza que tu oración y la nuestra llegará al Trono de la gracia, y Nuestro Señor Jesucristo intercederá por tu clamor y el mío.
Sé que mi pueblo, esta tierra que estoy habitando no será devastada, sino, será transformada con un gran arrepentimiento. Ayúdame a orar como siempre, la justicia divina es el poder de Dios, amén.
Quizá esperabas otro mensaje, pero es lo que Dios ha puesto en mi corazón, y deseo compartirlo contigo en este día, amén.
Tu hermano Marco Marin Parra.
Bendiciones.
Suecia - Lysekil.
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